¿Quién tiene la culpa de que cada vez leamos menos?

Edición de libros en España

Con cada nuevo estudio o encuesta que ve la luz pública conocemos que cada vez leemos menos, haciéndose mayor este descenso de las horas dedicadas a la lectura ya sea en formato digital o en el tradicional formato papel, en los adolescentes. Las razones son muchas y algunas parecen muy claras por lo que mediante este artículo vamos a tratar de analizar de forma detalle; ¿quién tiene la culpa de que cada vez leamos menos?.

Hace no demasiados años leer era una de las formas más tractivas de entretenerse, culturizarse o disfrutar tanto para adultos como adolescentes, pero los tiempos cambian y sobre todo los adolescentes han encontrado otras formas de divertirse como pueden ser las videoconsolas, el mundo de la red de redes o incluso los dispositivos móviles y sus cientos de aplicaciones disponibles.

La mayoría de las personas adultas sigue dedicando prácticamente el mismo tiempo a la lectura aunque algunas de ellas se han visto devorados por las posibilidades que ofrece Internet y se pasan horas y horas delante de la pantalla del ordenador o con su tablet yendo de un sitio web a otro sin recordar que el libro que compraron hace ya casi un año sigue sobre la mesita sin empezar.

El caso más preocupante radica en la juventud para los cuales leer un libro está entre las últimas prioridades y prefieren antes usar su smartphone, jugar a la videoconsola o navegar por la red de redes. A pesar de lo maravilloso de la lectura esta no engancha y la tecnología está siendo la principal culpable de que cada vez sea lea menos. A buen seguro muchos de esos adolescentes que no leen ni un solo libro al año pero si nos visitan con regularidad me dirán que ya leen los periódicos, el WhatsApp o el Facebook pero por mucho que os empeñéis eso no es lo mismo que leer un libro.

La respuesta a la pregunta que da título a este artículo ya la tenemos, las consecuencias de que cada vez sea lea menos son ciertamente muy graves y sólo hace falta echar un vistazo a nuestra sociedad llena de jóvenes que no saben construir frases con cierto sentido, cometen cientos de faltas de ortografía, su imaginación llega a donde llega su mano y el único libro que conocen es el de Belén Esteban y ese de recetas que su madre sigue al pie de la letra para cocinar.

Leer es fundamental para divertirse y disfrutar pero también para otros cientos de cosas que se están dejando muy de lado.